Según se acerca el buen tiempo, empezamos a sentir la necesidad de cambiar la comida caliente por la fría. Lo mismo pasa con el café, en estas fechas el café con hielo es una muy buena opción.
Pero, estamos seguros de que sabemos hacer un buen café con hielo y aprovecharlo a fondo?
En este post seguiremos los consejos de Patxi troitiño, viendo los errores más comunes y como solucionarlos.
Errores más comunes al hacer café con hielo
Vamos a ir directamente a la parte final de proceso, no vamos a comentar como preparar el café, nos situaremos en ese momento donde ya tenemos nuestro café preparado y buscamos introducirlo en los hielos.
En ese momento, la mayoría de personas trabajan con dos vasos. En uno de los vasos tienen los hielos ya preparados y en el otro el café. Error.
En el momento que introducimos los hielos en el vaso se comienzan a derretir, por lo tanto, mientras echamos el azúcar, removemos y trabajamos en la otra taza (la que tiene el café), la que tiene los hielos empieza a llenarse de agua fría, lo que crea una mala mezcla final.
Si nos paramos a pensar, la gran mayoría lo hemos hecho o hemos visto hacer el café con hielos así. Se ponen a trabajar en la taza de café mientras en la otra los hielos se van deshaciendo y a la hora de juntar crea un café sin consistencia.
No es algo raro, buscando recetas en internet me he encontrado con una gran cantidad de cafés así, como puede ser la imagen a continuación.
Como podemos ver, es un café sin cuerpo, visualmente no es agradable y realmente afecta en el sabor y consistencia final.
Como crear un buen café con hielo?
Introduciremos en la ecuación una coctelera, no tiene que ser cara, no hace falta ser un profesional ya que es una tarea sencilla.
Por ejemplo en Amazon por tan solo 15€ tenemos esta coctelera de acero inoxidable que tiene una capacidad de 750ml, la cual podremos usar para esto y para preparar múltiples bebidas.
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Entonces, ahora trabajaremos sobre la coctelera, en vez de tener dos vasos o tazas.
Una vez hemos preparado nuestro café y lo tenemos en la taza, es el momento de echar los hielos en la coctelera, justo después introduciremos el edulcorante (ya sea artificial o azúcar diluido).
Con eso hecho, sin perder tiempo verteremos el contenido de la taza de café en el interior, cerramos y «batimos«. No hace falta florituras ni un conocimiento increíble sobre cocteleras, simplemente agitamos con fuerza un par de veces.
Listo, solo nos queda abrir la coctelera y verter el contenido en una taza o vaso limpio, veremos como nos queda un café con un cuerpo increíble y una gran espuma.
Realmente es un cambio muy sencillo, introducir la coctelera para no perder tiempo y centrar los esfuerzos en un solo objetivo.
De esa forma pasamos de un café sin mucho cuerpo a un café increíble.