Si algo hace a una cafetería especial es su historia. Seamos sinceros, nos gusta lo moderno, pero también ir a lugares antiguos, llenos de vivencias, esto ocurre en la cafetería «Café del Centro», situada en Lugo.
Localización Café del Centro
Situado en plena Praza Maior de Lugo, lo hace un sitio bastante fácil de visitar, ya que tanto para turistas como para los habitantes de la ciudad es un sitio muy transcurrido, por el que sueles pasar habitualmente, entonces
una parada ahí es casi obligatoria.
Historia
El Café del Centro es posiblemente la cafetería más antigua de Lugo, ya que data del 1903, la cual principalmente abrió con otro nombre.
En el momento de su apertura esta cafetería de llamaba «Café Moderno», ya que contaba con la tecnología puntera de la época.
Hoy en día, visitar esta cafetería es como dar un salto al pasado, como ir a principios del siglo XX.
La cafetería sigue manteniendo su esencia, con sus maderas nobles, con estatuas que representan a sus primeros clientes y fueron regaladas por la Diputación de Lugo en su centenario.
Como pasa en muchos de estos cafés históricos, fue punto de reunión de muchos intelectuales, donde debatían y tenían interesantes tertulias.
Por lo tanto, debido a su historia, buena localización, amplia terraza, etc. la convierte en una de las cafeterías emblemáticas de la ciudad de Lugo.
Opiniones de los clientes y análisis
En las opiniones de los clientes acerca del Café del Centro encontramos un punto en común en la gran mayoría, lo que destaca es su valor histórico.
No es un lugar donde vayas por su calidad del café, de las comidas o de los postres, si no que vas por la historia del lugar.
Sobre el servicio las opiniones son mayoritariamente buenas, comentan que la atención es buena y el personal amable, claro está, hay que tener en cuenta su localización y la baja competencia de la zona, por lo que
hay momentos de la semana donde se masifica y obviamente la calidad de atención baja debido a la saturación del personal (que bastante hacen los pobres).
No menos importante decir que presumen de que se puede comer a cualquier hora, y es cierto, ya que la cocina está abierta de forma permanente, un punto que no podemos pasar por alto.
Por lo tanto, nos encontramos con que es una cafetería con una gran localización, gran valor histórico y un buen trato por parte del personal, creo que puede ser una parada interesante si nos encontramos por la ciudad.
